jueves, 22 de febrero de 2007

Milovan Mirosevic






















Milovan Petar Mirosevic (*Santiago de Chile, 20 de junio de 1980), es un futbolista chileno, ha realizado su carrera en la Universidad Católica de Chile y Racing Club de Avellaneda de Argentina.

Biografía

Debutó en la Primera División del fútbol chileno en 1997, como parte de la plantilla de la Universidad Católica, que acababa de ganar el Campeonato nacional de apertura en su país.

En el conjunto cruzado se destacó por ser un gran conductor y pateador de media distancia, consolidándose como estrella del club e ídolo de la hinchada, obteniendo el título nacional de liga el año 2002.

En 2003 pasó a las filas del Racing Club de Avellaneda y a mediados de 2006 fue transferido al club de Israel Beitar Jerusalem FC.
Selección nacional

En el año 2000 fue miembro de la selección chilena Sub-23 que en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000 obtuvo la medalla de bronce.
Posteriormente fue parte activa de la selección chilena que participó en las eliminatorias para la Copa Mundial de Alemania 2006.


miércoles, 21 de febrero de 2007

Mark González














Desde muy niño le gustaban los deportes, además su padre fue un ex futbolista chileno que jugó profesionalemnete en Sudáfrica. Mark llegó a Chile a los 10 años, a Valparaíso, instalándose en la casa de sus abuelos maternos, debido a la separación de sus padres. Mark fue un niño muy despierto, muy compañero de su hermano Raúl, muy inquieto y amante de la pesca.
De Chile a España
En Chile, pasó por los dos clubes de importancia en la Quinta Región, el Everton de Viña del Mar y el Santiago Wanderers. En el primero, no tuvo la mayor suerte, y en el club caturro fue en donde dio muestras de buen fútbol. Fue así que fue llevado a Santiago, para fichar por otro equipo: Universidad Católica. Mark González debutó en Universidad Católica el año 2003 con Juvenal Olmos de director técnico. Luego de un mal campeonato de Apertura 2004, fichó por el Albacete Balompié (España), donde jugó hasta la temporada 2005, participando en 20 encuentros y anotando 5 goles. Al finalizar la temporada se lesionó al hacer un gol de cabeza, el diagnóstico fue: rotura de ligamento cruzado anterior de la pierna izquierda. Esta lesión lo tuvo fuera de canchas por 9 meses, recuperándose en Chile.
Una nueva aventura
A pesar de la lesión, el poderoso club inglés Liverpool FC, equipo que logró en estos últimos años salir campeón de la Liga de Campeones de la UEFA, se interesó en el joven mediocampista e hizo todo lo posible por ficharlo. Según las reglas impuestas en Inglaterra, la selección chilena debía estar entre las mejores 70 selecciones del mundo para que Mark pudiera jugar en el club; pero como la selección chilena se encontraba fuera de ese rango, Mark no pudo jugar en el Liverpool FC apenas fichó, sino que tuvo que irse nuevamente a España a la Real Sociedad, club de San Sebastián, donde fue la salvación para que el equipo vasco no descendiera a segunda división. En su primer partido, en calidad de cedido, ahí hizo un gol y de ahí en adelante nadie podía pararlo, convirtiendo en un corto tiempo 6 goles, 5 de ellos realizados en los 16 partidos que jugó en la liga. Fue apodado por los hinchas donostiarras como "Dios Mark" o "San Mark".
Un gol vital
Una vez terminada su aventura en la liga hispana, partió a Liverpool a integrase al conjunto de los reds. Debutó con su nuevo equipo en un amistoso ante el FC Kaiserslautern, con triunfo del conjunto alemán, por 3-2. Y en un partido por la ronda previa de la Liga de Campeones, ante el Maccabi Haifa de Israel, anotó el gol de la victoria con el cual su equipo aseguraba los pasajes a la próxima edición del torneo más importante de Europa. Y en un partido de la Premier League inglesa, el chileno hizo su primer gol en competiciones locales, y lo hizo ante el Tottenham Hotspur.

martes, 20 de febrero de 2007

Ricardo Gabriel Lunari


















Llegó a Universidad Católica en 1993, proveniente de Newell’s Old Boys de Argentina, de inmediato entra al corazón de los hinchas cruzados, mostrando una garra inusitada y un gran despliegue que encantó a los simpatizantes.Luego de obtener el sub-campeonato de la Copa Libertadores el ’93, parte a México para estar sólo un año alejado de San Carlos de Apoquindo, pues regresa a mediados de 1995, por expresa petición de Manuel Pellegrini, entrenador de la UC.



Luego de 6 meses en el equipo, nuevamente tiene que partir, regresando en 1996, para formar parte del plantel campeón del torneo apertura de 1997, cuando derrotaron en la final a Colo-Colo, con un gol del propio Lunari.Ricardo Gabriel Lunari, jugador que destacó en el equipo por su amor a la camiseta y por su entrega total a los colores de la UC, con su camiseta N° 8 en la espalda.



¿Qué significó para ti vestir la camiseta cruzada?

“Para mi la UC es lo máximo. Es la camiseta que más quiero. Desde el primer momento que llegué me identifique con La Católica. Me siento un cruzado más. Me da la impresión que hubiese salido de las inferiores. No le veo ninguna diferencia con otros chicos surgidos de las cadetes. Siempre va a ser este mi club no sólo acá sino que en todo el mundo. Fueron unos momentos muy bonitos. Gracias a Dios, en La Católica me tocó vivir momentos muy lindos y me encanta siempre recordar aquello”.


Cuál fue el mejor momento que viviste en la UC?¿

“Fue en 1997. Habíamos pasado 10 años sin títulos. Y sabía que ese era el momento. Todos nosotros dijimos, este es el año. Tenía que ser y por suerte lo logramos. A lo mejor otros años dijimos lo mismo y no lo pudimos hacer. Pero aquel año cumplimos con lo que nos habíamos propuestos. Fue una de mis mejores experiencias en el fútbol”


¿Qué recuerdo tienes de los hinchas?

“Yo gracias a Dios me mantengo en contacto con la gente de la UC, a través de las páginas de la Católica, los foros, y bueno siempre he sentido el cariño y el apoyo que me dieron desde la primera vez que llegué a Santiago. Cada vez que voy a Chile confirmo ese sentimiento que es mutuo, porque realmente me siento un cruzado más. Paso a paso voy siguiendo siempre todas las campañas y haciendo fuerza para que la UC salga campeón”.



lunes, 19 de febrero de 2007

Jorge Polo Quinteros













































Jorge "Polo" Quinteros (n. 27 de julio de 1974 en San Fernando, Provincia de Buenos Aires), es un destacado futbolista argentino y delantero salido del club Argentinos Juniors. De destacada trayectoria, ha defendido los colores de Argentinos Juniors, del RCD Mallorca, Talleres de Córdoba, San Lorenzo, Chacarita Juniors y Universidad Católica. A comienzos del mes de julio del año 2006 anunció su retiro como futbolista profesional, para dedicarse a representar a sus pares, pero Quinteros no dejó el fútbol y firmó por Argentinos Juniors.


Su último partido oficial lo jugó el 3 de diciembre de 2006 frente a Estudiantes de La Plata, marcando el primer gol del encuentro, que finalizó 2-2.


En partidos internacionales y Clásicos el “Polo” jugaba como nunca y convertía goles valiosos. Siempre será recordado por el penal del título en la definición del Clausura 2005.
“En la Católica disfruté mucho, pero esto lo vengo madurando hace bastante tiempo. Tengo 32 años y desde los 29 que lo vengo pensando. Con mi familia conversamos y decidimos que nos queremos de volver a Buenos Aires. Voy a trabajar en la oficina con mi representante porque es una profesión que me motiva mucho”, señaló Quinteros.

¿Y por donde pasa esa decisión?
Porque estoy menos tolerante con varias situaciones del fútbol. Ya no aguanto los arbitrajes injustos y peleo más en la cancha. Me pongo viejo y eso no me gusta. Por eso, decidí retirarme. Por ejemplo, Rubén Selman no me quiso cobrar un penal evidente y ante Colo Colo sucedió lo mismo. Parecía que quería que ganara la U. de Chile y antes, ese tipo de acciones, me las guardaba un poco más. Pero ahora no las puedo tolerar.

La noticia sorprendió a muchos ¿Por qué no se la comunicaste antes al Cuerpo Técnico?
Es que durante los 15 días de vacaciones, realmente le tomé el peso a la decisión y pude concentrarme en lo que quería mi familia también. Lo avise lo más pronto que lo supe. A Jorge Pellicer no le gustó mi decisión, pero la respetó y eso habla muy bien de él.

El problema es que ahora se tienen que abocar a buscar otro delantero para el segundo semestre y queda poco tiempo para que comience el Torneo de Clausura…Sí, pero digo una cosa. En Argentina existen muy buenos jugadores que estarían más que interesados en venir a jugar a Chile. Antes, en mi país, se seguía poco la competencia local, pero desde que la Católica jugó la semifinal de la Copa Sudamericana, se observa con atención lo que pasa acá. No tengo dudas, que mi cupo se va a solucionar con un muy buen delantero.

¿Qué te dijeron tus compañeros?
Algunos no lo podían creer, pero después lo aceptaron. Llevo dos años en la UC y ya me conocen mi forma de pensar. Saben que vengo con esta idea de hace tiempo y sólo recibí apoyo. Los recuerdos, siempre serán los mejores.
¿Te vas conforme de tu paso por la UC? Muy contento. Con la Católica volví a vivir y por siempre voy a estar agradecido. Me sentí importante, tanto en la cancha, como en la vida cotidiana. Los hinchas me hicieron sentir muy bien e incluso me saludaban fanáticos de otros equipos. Lo más trascendente de esta decisión es que estoy feliz con esta resolución. La única pena es no haberlo pensado un poco antes y así toda mi familia me hubiera visto en el último partido, pero ya está. Me voy y dejo muy buenos amigos en el fútbol.
Jorge Pellicer fue uno de los que más insistió para retenerte
¿Qué legado dejó en tu carrera?
Estoy muy agradecido por la oportunidad que me dio Jorge Pellicer. El me rescató y logró reencantarme con el fútbol profesional. Pensaba que a los 29 años, cuando llegué a la UC, no tenía nada que hacer en el fútbol. Pero logré consolidarme y motivarme con muy buenas campañas. Sobre todo, en el ámbito internacional.

¿Se descarta algún partido de despedida?
Sí. Ya decidí dejar el fútbol y no voy a hacer nada.

¿Cómo evalúas toda tu trayectoria desde Argentinos Juniors hasta ahora en la UC?
Lo mío fue más que positivo. El fútbol me dio mucho más de lo que le entregué. Mi infancia resultó muy dura y ahora tengo casa, más auto. Con mi carrera estoy muy satisfecho porque llegué adonde quería. Con mi mentalidad, pude ir a Europa y cuando me relajé, regresé. Siempre le digo lo mismo a los muchachos: Hay que ponerse metas y si uno es perseverante, lo va a lograr. Tuve dos o tres años muy malos, pero lo vivido en Católica fue lo mejor de mi trayectoria, junto a mi paso por Boca Juniors. Son los dos clubes donde tuve mis mejores años.

¿Qué mensaje le enviaría al hincha cruzado?
Sólo agradecimientos. Me esperaron cuando no rendía y creo que finalmente les respondí. Siempre me sentí apoyado e importante por ellos. Espero que el club siga cosechando éxitos porque se lo merece.